LAS CHICAS DE RONCESVALLES

 Así las llamo yo. Es el centro madre, donde empezó todo. El primero que se abrió el primero que  está sufriendo los cambios, al primero al que llegan todas para formarse. Es como el primer hijo, todos los hijos se tienen con ilusión pero el primeroooo es el primero. 

Estos días su equipo está revolucionado con tantas idas y venidas, hoy trabajo en este local y mañana en este otro y aún así no están perdiendo la sonrisa, a veces los nervios,  pero no la sonrisa! Es broma.

Está la jefa pero de ella hablaremos otro día, hoy toca centrarse en " mis chicas"

Ela lleva con nosotros 17 años, como todas, ni se había casado (le faltaba poco) ni tenía hijos, empezó en este centro pero luego estuvo muchos años en el centro que tuvimos en Barañain. Cuando le tocó el cambió pensé que no se iba adaptar fácilmente pero ¡qué va!, enseguida se hizo al centro-madre y ahí continua. Desde aquí la saludo, está recuperándose de una intervención y en cuanto esté lista ataque de nuevo. 

Ella es la risa, la charla, la improvisación y la espontaneidad. Pone todo en duda y a prueba y no ofrece nada que no  le convenza a ella personalmente. Le encantan  las uñas y es muy buena pero no se le puede poner ni un pero a su destreza en la cabina, los masajes también son su fuerte.

Margarita se incorporó al equipo más tarde y aún así lleva 11 años con nosotros. Era de las pocas veces que apostábamos por una persona con experiencia y más mayor y no nos equivocamos. Necesitábamos para este centro una persona que diera estabilidad, porque por el centro-madre siempre pasaban todas  las chicas para coger tablas y daba la sensación de  mucha rotación de personal. Es serena, elegante, simpática tiene la mirada de la gente que sabe, por eso gusta. Como ella considere que tienes una necesidad no te vas sin que te satisfaga, eso tenlo por seguro!. Es la "dama de la LPG" la pobre se da unas palizas con el aparato que vaya, ahora, todo el mundo que prueba repite.

Estefanía, la benjamina del grupo. Acaba de unirse  al equipo y es de esas personas que ves y tiene algo. Tiene ilusión, iniciativa, ganas, como pocas veces se ve. Es dulce, amable, cuidadosa y tiene un don para hacer las manos impresionante. Con lo exigente que somos nosotras para el tema de manicuras y el poco tiempo que lleva nos tiene alucinadas.